Simon Berger: reinterpretando materiales

El maestro contemporáneo del vidrio, Simón Berger, tiene un lenguaje plástico singular al explorar en profundidad el material de su obra: vidrios desechados que golpea y rompe con un martillo, para crear retratos e imágenes únicas. En sus manos, el martillo no es una herramienta de destrucción, sino un amplificador de efectos.

Sus retratos lacerados, esculpidos en vidrio, acercan la mirada a los rincones de las heridas transparentes que él llama “morfogénesis”. Pionero de esta técnica, sus piezas rotas evocan su fascinación por los rostros, especialmente los femeninos. Con su trabajo en los cristales de las ventanas, el artista se apropia de la realidad y explora las capacidades expresivas de los materiales inertes destinados a las fábricas. Sus pinturas metálicas se convierten en lienzos donde las percepciones se confrontan con las interpretaciones.

La pasión de Berger cuestiona las concepciones de lo que es un material “adecuado” para hacer arte. Berger construye sus delicadas piezas mediante las grietas que se forman entremedio de vidrios rotos.

La delicadeza de las obras de Simon es producto de un proceso creativo en el que utiliza la lógica de su formación de carpintero para trabajar el vidrio.